Han sido días de realidad. Ésa que no es metafísica.
Es calor, polvo, pavimento, piedras, paisajes en el horizonte.
Cuando se está cerca del límite, sólo cuenta avanzar un pie detrás de otro.
No hay objetivos mediatos.
Los primeros días son claves. Ya van tres días de tres kilómetros por día.
El segundo, creo que ha sido el más duro.
Ya no tomo el tiempo a la salida, tengo algunas lastimaduras en el pie derecho.
Es sólo aproximadamente un jarabe de una hora de realidad por día.
No todos los días.
La gente se cruza, algunos están corriendo otros caminan.
A veces, mis ojos buscan el descanso del paisaje en el horizonte. Otras, miro el pavimento
o las piedras. O tropiezo.
Mientras camino, pienso en lo que voy a escribir, o lo ya escrito, en el blog.
Por supuesto, que no tiene nada que ver con ésto.
Siempre, la lucha es contra uno mismo. Es bueno recordarlo, porque cuando estamos apurados
nos olvidamos demasiadas cosas.
Ajedrez, natación... atletismo. No importa el nombre que le des. Siempre está tu principal rival
presente-
Con suerte, y trabajo, recuperas tu fé. Tampoco es muy malo recuperar tu ego, si se te
ha ido la mano y lo has menguado demasiado...
Tú eres tu dueño.
Sólo tienes caminos para elegir por delante.
En cada ocasión debes hallar el modo de pasar a la siguiente etapa.
Como en los jueguitos de computadora. Sólo que menos inofensivo.
Un "Game Over" puede signicar que desapareciste, lisa y llanamente.
